Firma Electrónica Cualificada sin dispositivos electrónicos

13 noviembre 2022

Firma electrónica

¿Por qué utilizar un dispositivo electrónico de firma, cuando puedes firmar de forma más cómoda?

La digitalización del país es un proceso llevado a cabo con el objetivo de facilitar la gestión de documentos y simplificar la vida de los ciudadanos españoles.

Es innegable que se han conseguido grandes cosas: gracias a la firma digital y muchos otros servicios informáticos, nuestra vida se ha vuelto realmente más fácil. Sin embargo, aún hay varios aspectos que pueden mejorarse.

Piense en uno de los servicios que he mencionado antes: la firma digital.

Su utilidad es incuestionable: sin embargo, en la mayoría de los casos, sólo puede utilizarse a través de dispositivos electrónicos (Token USB, tarjeta criptográfica, lector smartcard, etc.) que pueden resultar especialmente engorrosos.

Afortunadamente, existe en el mercado una alternativa mucho más cómoda y, sobre todo, asequible: la primera firma digital remota gratuita.

¿Quieres saber lo que es?

Te lo cuento en el siguiente artículo. Pero antes, veamos brevemente cuáles son los contras de los dispositivos de firma electrónica clásicos y por qué deberías buscar una solución diferente.

Desventajas de los dispositivos electrónicos de firma

Hasta hace unos años, estábamos acostumbrados a asociar la idea de firma digital con el uso de un dispositivo externo que se conectaba al ordenador. Ya fuera un token usb o un lector smartcard con su tarjeta criptográfica asociada, este servicio siempre requería hardware adicional para ser explotado.

La razón se expone rápidamente: una firma electrónica cualificada sólo puede ser plenamente válida cuando va asociada a un certificado electrónico reconocido que certifica inequívocamente la identidad del titular del servicio. Y este archivo, por regla general, se coloca dentro de los dispositivos mencionados, de modo que pueda consultarse cada vez que se realiza una firma digital.

Desgraciadamente, estos sistemas de firma digital tienen un gran defecto: no son aptos para su uso esté donde esté el titular.

Imagina que tienes un dispositivo de firma electrónica y estás fuera de casa. De repente, recuerdas que tienes que enviar urgentemente un documento informático que debe firmarse electrónicamente. Para tenerlo a mano, lo ha guardado en su móvil o en el portátil que siempre lleva consigo, pero ¿cómo puede firmarlo digitalmente sin verse obligado a volver a su casa?

No puedes, a menos que lleves contigo los dispositivos necesarios. Pero imagínate lo engorroso que sería tener que llevarlos siempre encima.

Por ello, numerosos proveedores han decidido poner a disposición de sus usuarios una alternativa mucho más cómoda: la firma digital remota.

Firma digital remota, la alternativa ideal para quienes desean un servicio práctico y dinámico

¿Qué tiene de especial la firma digital remota?

La respuesta es sencilla: está vinculado a un certificado de firma conocido como certificado remoto porque se almacena en un servidor perteneciente al proveedor que presta el servicio. Por consiguiente, no requiere ningún dispositivo externo.

Nota: esto no significa que la firma digital remota se proporcione siempre sin hardware. De hecho, su aplicación se completa introduciendo un código llamado OTP, o One Time Password. Habrá oído este término a menudo: es el mismo que se utiliza para indicar esos códigos desechables que hay que introducir cuando se accede a una cuenta informática a través de un sistema de autenticación de dos factores.

La cuestión es que el código OTP puede generarse de dos maneras:

  • a través de una especie de llave similar a las que se utilizan, por ejemplo, para la banca a domicilio;

  • por SMS.

Por supuesto, la única forma de que el titular pueda utilizar el servicio sin trabas es esta última: basta con llevar encima un simple móvil y se podrá firmar digitalmente cualquier documento informático rápidamente dondequiera que uno se encuentre.

Probablemente esté pensando que un servicio tan cómodo, muy superior a las demás alternativas, también es caro, ¿verdad?

Bueno, en realidad no es así: las firmas digitales remotas cuestan menos que la mayoría de los kits tradicionales porque no incluyen gastos de envío de dispositivos externos.

Pero aún hay más: con CartaSinSobre puedes tenerla totalmente gratis.

Conozca queFirma, la primera firma digital remota gratuita

queFirma es un servicio exclusivo de CartaSinSobre que sirve para firmar documentos informáticos con Firma Electrónica Cualificada, se puede obtener sin coste alguno y funciona mediante un certificado electrónico a distancia que se puede renovar gratuitamente con un solo clic.

La ventaja reside en la fórmula pago por firma: en esencia, nuestra firma digital 
no tiene coste de activación. Sólo paga cuando firma un documento electrónico.

Estas son las tarifas de queFirma

  • cada firma digital ralizada cuesta 5,99 euros;

  • pagando 0,99 euros, es posible aplicar a los documentos electrónicos un sello de tiempo cualificado que amplía la validez de la firma durante 20 años;

  • Además, también es posible imprimir el archivo firmado digitalmente en formato papel y mantener su validez legal insertando un Código Seguro de Verificación. El coste de este servicio es de 0,99 EUR.

En conclusión

En este artículo explicamos las desventajas de las firmas digitales que sólo funcionan con dispositivos electrónicos de firma. La engorrosa naturaleza de estos dispositivos puede eliminarse con una alternativa práctica: las firmas digitales remotas.

Gracias a queFirma, en CartaSinSobre te damos la posibilidad de firmar fácilmente tus documentos electrónicos estés donde estés, incluso desde tu móvil, sin tener que comprometerte a una costosa suscripción.